Depende de su nacionalidad. Los ciudadanos de algunos países están exentos de solicitar visa para estadías cortas, mientras que otros necesitan solicitar una visa Schengen incluso para estadías inferiores a 90 días.

No, las solicitudes de visas Schengen y nacionales deben presentarse en las representaciones consulares italianas en el país extranjero de residencia del solicitante.

Sí, la mayoría de los Consulados y Embajadas italianas exigen la presentación personal del solicitante, que deberá dejar su pasaporte durante el proceso.

En general, no, salvo en casos de fuerza mayor (por ejemplo, hospitalización).

Sí, en los 8 días siguientes a la entrada en el espacio Schengen con una visa nacional de larga duración, debe proceder a presentar una solicitud de permiso de residencia.

Los visados nacionales de larga duración son emitidos por una duración máxima de 365 días, transcurridos los cuales no es necesario proceder a la renovación del visado si la persona, una vez llegada a Italia, ha cumplimentado la solicitud de permiso de residencia, que sustituye al visado.

Sólo los titulares del ICT UE, de la Tarjeta Azul UE y del Permiso de Residencia de Larga Duración UE pueden, en determinadas condiciones y por un período de tiempo limitado, trabajar en otros países de la UE.

Los familiares de ciudadanos extra-UE titulares de un permiso de residencia por trabajo subordinado, por cuenta propia (autónomo), o por asilo, estudio, destinación ICT, motivos religiosos o familiares de al menos 1 año o, independientemente de la duración, para inversionistas, Tarjeta Azul UE y ICT UE, pueden obtener un permiso de residencia para vivir y trabajar en Italia a través de los procedimientos de cohesión familiar y reagrupación familiar.

Los familiares de ciudadanos italianos o de la UE que ya residan en Italia pueden obtener un permiso de residencia de conformidad con la Ley 30/2007 a través de un procedimiento simplificado.