Italia y las parejas de hecho: ¿tienen derecho a solicitar un permiso de residencia?

En Italia, las parejas de hecho enfrentan un camino lleno de obstáculos legales para obtener el permiso de residencia, especialmente cuando uno de los miembros es ciudadano italiano que no ha ejercido su derecho a la libre circulación dentro de la Unión Europea.

Una distinción legal problemática

La legislación italiana, al diferenciar entre ciudadanos italianos "estáticos" y "móviles", crea una disparidad en los derechos de residencia para las parejas de hecho no comunitarias. Mientras que las parejas de ciudadanos italianos que han vivido en otros países de la UE pueden beneficiarse de normas más favorables, aquellas vinculadas a ciudadanos que siempre han residido en Italia enfrentan mayores dificultades.

El contrato de convivencia: una solución parcial

La Ley Cirinnà de 2016 introdujo el contrato de convivencia, permitiendo a las parejas de hecho formalizar su relación. Sin embargo, la implementación de esta ley ha sido inconsistente. Algunas Municipalidades exigen que ambos miembros de la pareja residan en la misma Municipalidad para registrar el contrato, a pesar de que la jurisprudencia italiana reconoce la convivencia basada en vínculos afectivos duraderos, independientemente de la residencia compartida.

Decisiones judiciales y desafíos administrativos

Tribunales italianos han fallado a favor de parejas de hecho, permitiendo el registro de la convivencia incluso sin un permiso de residencia previo detenido por el miembro de la pareja de nacionalidad extra-UE. No obstante, en la práctica, las Municipalidades y las autoridades de inmigración a menudo presentan obstáculos burocráticos, creando un ciclo vicioso donde se requiere un registro para obtener el permiso de residencia, pero este registro es denegado por la falta de dicho permiso.

Eso dicho, una base jurídica para conceder derechos de residencia a las parejas de hecho de ciudadanos italianos residentes permanentes podría derivarse del artículo 19 del D.L. 286/1998 que establece que los familiares no comunitarios hasta el segundo grado o los cónyuges que convivan con un ciudadano italiano no pueden ser expulsados; a esa prevision se suma la sentencia de la Corte di Cassazione n.º 44182/2016, según la cual la convivencia de un ciudadano extranjero con un ciudadano italiano, reconocida mediante un “contrato de convivencia” regulado por la Ley 76/2016, impide la expulsión equiparando, de hecho, a la pareja de hecho con el cónyuge expresamente citado en el articulo 19 del D.L. 286/98.

Conclusión

La situación legal de las parejas de hecho en Italia destaca la necesidad de una armonización legislativa que garantice derechos equitativos para todas las formas de unión y protega el derecho a obtner un permiso de residencia para Italia para la pareja de facto de un ciudadano italiano. Mientras tanto, las parejas afectadas deben navegar por un sistema legal complejo y, a menudo, contradictorio, que pone a prueba su resiliencia y compromiso.

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